URRUTIA habla de las renovaciones de Llorente y Bielsa

La directiva del Athletic lucha en dos frentes. En el campo busca la final de la Liga Europa, un sitio en la Liga de Campeones y el título de Copa. En los despachos, la batalla se libra en conseguir que las dos piezas angulares del proyecto deportivo sigan vinculadas al club. Josu Urrutia aludió ayer al asunto de las renovaciones. Lo hizo como un dirigente confiado, convencido de que el técnico y Llorente estamparán su firma en el contrato. Con el rosarino no hay plan B. «Nuestro única alternativa es Marcelo Bielsa». Con el delantero las diferencias económicas persisten y eso significa que no habrá acuerdo inmediato. «No es demasiado importante que firme antes del final de temporada o después».

Urrutia no tiene dudas sobre la descomunal aportación de Bielsa al Athletic. «Ya dije que es un técnico que nos iba a aportar mucho». Las palabras del presidente llegan apenas unas horas después de que su buen amigo Ernesto Valverde anunciara el final de su segunda etapa en el Olympiakos. El antiguo extremo fue la primera alternativa del deustoarra para el banquillo. Su negativa a romper con el club griego hizo que se dirigiera a Bielsa.

Hoy Urrutia sólo piensa en el argentino. «Nuestro único escenario es Bielsa. No hay más alternativa que él». Un elemento central en las conversaciones con el técnico son los valores. No ha dicho al club que se irá. Por tanto, hay convencimiento de que seguirá.

 

Presidente y entrenador pactaron discutir sobre su continuidad al finalizar el año. Urrutia no quiere presionar al técnico. «Está centrado más en lo que nos estamos jugando que en su porvenir. Mi contacto con él es fluido, aunque es mayor por parte de José Mari Amorrortu (director deportivo). Quedamos en que hablaríamos al finalizar la temporada y eso haremos», indicó. Quiso además templar el ambiente. La continuidad del entrenador, señaló, no depende ni de la obtención de títulos esta campaña ni de la llegada de refuerzos.


¿Peor escenario con Llorente?


Con Llorente se observa el futuro con más incertidumbre. El delantero insinuó hace unos días que aplazaba la decisión sobre su continuidad al final de la Eurocopa. El sentido común dice que es el peor de los escenarios para el club. Un posible éxito en el torneo internacional y que acabe contrato a final de temporada pueden revalorizarle. Eso fortalece su posición en la mesa de negociaciones.


Desde que llegó, Urrutia se marcó como objetivo sellar cuanto antes el trato con Llorente. Que ayer hablara de que ahora no le corre prisa da a entender que las conversaciones no avanzan al ritmo que esperaba. El club le ofrece 4,5 millones netos, pero la petición del atacante está por encima.


El presidente rojiblanco quiso mostrarse tranquilo porque mantiene que la primera exigencia para que el jugador siga ya se ha cumplido. «Quería saber si quiere quedarse, y quiere quedarse». Luego vino a admitir que, tal y como pretende Llorente, tendrá que esperar para resolver el enigma. Eso sí, intentó que no aumente la presión sobre el jugador. «Si renueva antes de final de temporada o después no creo que sea demasiado importante. Lo esencial es que tenga el ojo puesto en los acontecimientos tan bonitos de este final de temporada».


Urrutia es consciente de que lo importante en la gestión son los hechos, y no las palabras. Además de Llorente y Bielsa, hay otros dos jugadores importantes que concluyen contrato en junio de 2013, Amorebieta y Susaeta. El dirigente miró hacia atrás y se felicitó por haber logrado ampliar los contratos de Iturraspe (2015) y De Marcos (2016). «Si no hubieran firmado, su cotización sería más alta», subrayó.